sábado, 21 de abril de 2007

Sábado lluvioso

He perdido, progresivamente, las ganas de salir por la noche. Imagino que será una cuestión, más que nada, laboral, de horarios, de ritmos de trabajo, de agotamiento físico. También creo que el sexo y la seducción se retiran cada vez más de la noche para agazaparse en los chats, en el ciberespacio y en las redes de amigos. Antes las barras -de bar- tenían un código: la mirada que celaba alguna promesa, pero ahora son más bien un catálogo de ausencias, o al menos lo son para mí. La noche me resulta cara y de garrafón. Pero eso nos salimos del circuito y nos montamos el botellón virtual de los contactos por internet, que son ubicuos, atemporales y a la carta.

Hoy llueve de forma dispersa, leve y como sin ganas. Es un día sin ganas. Pero yo tengo que trabajar, tenga o no ganas. Estaría bien que volviese el sol mañana, ir al Balneario, leer a Vila-Matas, dejar que la tarde se extinguiese entre los eucaliptos de la playa y el sol pausado y perezoso que se pone por Marbella. Y estaría bien terminar la noche con algún "alma del averno".

Bueno, os dejo con el vídeo de mi canción favorita de El Último de la Fila... Y tu ropa al sol.

3 comentarios:

AnA dijo...

Keki, Where are you?

BeBa dijo...

Kekichu: ayer te perdiste a J. cantando Aquarius en pleno cine al estilo Raphael. Y el video ochentero de la peli que vimos. Eras tu....!!!! Te queremos mucho

DaNieLo dijo...

Sucede que a veces la vida mata
y te encuentras solo, y en este corazón no reciclable
se hunden petroleros desahuciados y sospechas.

... Pero sucede también que, sin saber cómo ni cuándo,
algo te eriza la piel y te rescata del naufragio.